COCINANDO EN HALLOWEEN

¡Hola a todo el mundo!

Os vamos a explicar nuestra fiesta de Halloween. 

Habíamos decidido celebrarlo cocinando. Y teníamos pensado hacer tres platos: MOMIAS, ATAÚDES y SETAS VENENOSAS.  Y beber SAAAAAANGREEEEEEEE…

Primero hicimos las setas venenosas, que en realidad eran tomates-cherry con huevos de codorniz. También tenían mayonesa, y la hierba era lechuga. 

En las primeras fotos nos veis haciéndolo. Los gorros de cocinera los trajo Llara. Y la jeringuilla tenía mayonesa.

Después nos maquillamos. Maite daba mucho miedo.

A continuación hicimos los ataúdes y las momias (que en realidad eran sándwiches con esa forma). Los tostamos en la rustidera. ¡Estaban buenísimos!
Para terminar, Llara quiso casarse con Huesitos. Cristina era la madrina.

Si queréis las recetas, nos las podéis pedir en los comentarios y las mandaríamos a vuestro correo.
¡VOLVEREMOS CON MÁS SORPRESAS!

LA CAPACIDAD DE NUESTROS PULMONES

¡Buenos días, amigos/as!

Os vamos a explicar cómo se descubre la capacidad de nuestros pulmones.

Primero cogéis un caldero, lo llenáis de agua, y varias botellas de distintos tamaños. Cogéis también un tubo de goma.

Llenamos una botella de agua, y le damos la vuelta encima del cubo, sin que se salga el agua de la botella. Metemos una punta del tubo por dentro de la botella. Entonces cogemos mucho aire y soplamos por el otro extremo muy fuerte hasta que vaciemos los pulmones.

¿Habéis llenado la botella de aire? ¿Os ha sobrado? Id probando con botellas de varios tamaños hasta saber cuál es la capacidad de vuestros pulmones: ¿Medio litro solo? ¿Un litro? ¿Litro y medio?

¡Hasta el próximo día, amigos!

EMPEZAMOS NUESTRO BLOG

¡Buenos días a todo el mundo! Queremos daros la bienvenida a nuestro blog.
Pondremos las cosas más divertidas que hagamos. Esperamos que os gusten y lo paséis bien con nuestras actividades.

Hoy estuvimos mirando el corazón, los pulmones y el hígado de un corderito. A Llara le daba asco y no paraba de decir: "¡Pobre corderito!" Pero de todos modos sí que se atrevió a cogerlo, meter el dedo en el corazón, cortar... Cristina era más valiente porque quiere ser veterinaria.

El corazón era tan pequeño que cabía en el medio de la mano y no veíamos bien las aurículas y los ventrículos. Pesaba solo 50 g. El hígado era lo más grande, pasaba 270 g. Los pulmones pesaban 280 g, y se veía muy bien la tráquea.
¡Hasta el próximo día!